Han sido momentos
de mucha alegría y también de mucha tristeza, dejo una actividad que me mantuvo
activa día a día a lo largo de los últimos 5 años. Aprendí muchas cosas, me
sentí útil de mil formas, me ejercité físicamente y espiritualmente. La mayor
satisfacción, el deber cumplido, el gozo
de sentirme amada, de estar haciendo lo que Dios me pedía; de estar en la
presencia de Dios la mayor parte de la mañana, de hablar de Papa Dios, de hacer
misioneros a niños de 3, 4, 5 y 6 años; de enseñar ha santiguarse, de cantar y hacer mímica al mismo tiempo, de
rezar y colorear.
Hoy he dejado de
dar clases en el colegio, ya no seré” la profe de valores” o” la profe que sabe
de Dios”. ¿Tristeza? la hay pero al mismo tiempo una alegría inmensa pues he
visto, he vislumbrado lo que Dios Padre tiene para la familia y me lo ha
mostrado de una manera que me llena de gozo pues es la alegría y felicidad de
otros.
Les prometí a las
maestras del Preescolar que mis palabras de agradecimiento las haría a través
del blog, así que aquí estoy, luego de haber sentido una gran tristeza al
despedirme con el Padrenuestro que los niños rezaron en el acto final.
Fueron 5 años
dedicados a la docencia de la Educación Religiosa Escolar. Cada una de las
maestras, cada uno de los salones por los cuales pasé sembraron en mí la
satisfacción de “enseñar al que no sabe”
Vi en muchas ocasiones como las maestras estaban
muy atentas a la explicación que les daba a los niños, en ocasiones mis
palabras iban dirigidas a ellas. Aquí un pequeño detalle para cada uno de los
niveles.
Maternal
La ternura de los
salones de maternal, me hicieron
sentir lo que será para mí ser abuela en algún momento. Los niños se enamoraron
de una canción, y a lo largo de todo el
año escolar la cantamos.Creo que fue la mas solicitada. Me encantó cantarla una y otra vez. Balmi, te encargarás de que se aprendan otra en el 1er nivel.
Maternal A, Danny, Kimberly , gracias por esa ayuda
tan maravillosa. Kimberly tú alegría me contagiaba juventud.
Danny tu apoyo
profesional ante mi pregunta ¿entenderán? fue maravillosa, eres una maestra
fabulosa.
En el Maternal B,
Balmi y Naileth, otro salón que me conmovió. Naileth, me gustaría tenerte cerca
cuando tenga mis nietos, estoy segura que tu imposición disciplinaria
mantendría a raya mi debilidad de abuela.
Balmi,” no se
preocupe profe”,” qué necesita profe”, siempre tan atenta. Me hiciste sentir
parte del Preescolar, gracias. Tu creatividad me asombraba, lo que podías hacer
con la idea o intención de lo que yo quería era asombrosa. ¡Demos gracias a
Dios por esos dones con los cuales has sido bendecida!.
Kim y Naileth |
1er Nivel
Los Primeros
niveles, todos diferentes, algo difícil para mí, pues en ocasiones confundía la
manera de trabajar de cada una de ustedes.
Gabriela, tu paciencia y tolerancia brota por
los poros. Recuerdo a Miguel y mi asombro ante el grado de stress que podía
causarle el hecho de no terminar de colorear, aquí aprendí a medir mis palabras
y cuidar el “rapidito que se acaba el tiempo”.
Yosi, todo estaba listo cuando yo llegaba, en
ocasiones con retraso, discúlpenme debí ser mas medida con el tiempo.
Adriana y Jessy, mi primera clase de los jueves, me
encantó conocerlas, los niños me esperaban con entusiasmo, gracias por preparar
todo el material que necesitaba y ayudar con la disciplina. Este grupo no lo vi
quejarse de tener hambre a mi hora de clase, ¡qué extraño!
Yssis y Luisinar,
otro grupo del 1er Nivel muy hermoso, que atentos, pintaban bellísimo, cantaban
cuando se los pedía. Tu paciencia Yssis es admirable, siempre he sido
despistada, aprendí a tomar en cuenta los pequeños detalles. Luisinar, diría
que complementabas la autoridad que en algunas ocasiones hacía falta en el salón.
Yossi, Lissi y Jessi |
2do Nivel
Los Segundos Niveles,
me encantó trabajar con estos dos grupos, en realidad disfrutaron el realizar
su carpeta en el 3er lapso. En cada
salón había su particularidad.
Massiel y Angie, que grupo tan atento a mis clases, trabajaron
con alegría, dedicación, les encantó su carpeta del III lapso. Massiel,
aprovechaste las clases para aprender
más de tu Fe. Trabajé muy a gusto con los niños, eran los primeros en
aprenderse las oraciones. Gracias Angie por tener todo ordenado, a la mano y
preparado.
Marjorie y Luz,
al pensar en su salón viene a mi mente Gustavo, con sus preguntas y anécdotas.
A Valery que siempre preguntaba ¿vamos a pintar? o su insistencia al decirme,
“pon música”. Marjorie puedes seguir preguntando, buscando la verdad,
aprenderás del inmenso amor de Dios para con su creación.
Luz me preguntaba
si en algún momento te hice sentir mal, discúlpame, pero creo que diste un paso
muy importante al santificar tu hogar. Supongo que los niños se aprendieron el poema
con tu ayuda, gracias.
Angie y Luz |
3er Nivel
Estos grupos eran
Blanco y Negro, mientras en uno salía de estar entre nubes, en el otro salía
como si me hubiesen caído a palos. Los conocí en Maternal y por tres años les
fui enseñando sobre el amor de Dios.
Carolina y Eva:
como nos costó trabajar aquí. Pero segura estoy de haber sembrado e iniciado a
los niños en su Fe. Este era el salón que llegaba a dar mi clase cuando lo
niños no soportaban más el hambre.
Carolina,
agradecida por tus sugerencias, y tu inmenso apoyo para conseguir el testimonio
que necesitaba, Dios sabrá recompensártelo.
Eva: siempre
atareada con las carpetas, pero lo logramos. Recuerda tu Fe la trasmites a tu
hijita.
Yadira y Zubeiry este era el salón de la Paz, con sus
pequeñas tormentas, pero nada que no se pudiese controlar. Trabajaban en
silencio la mayoría de las veces, eso sí, no podía faltar la música.
Yadira, que
comprensiva, gracias por tu inmenso apoyo y trasmitir la belleza de tu alma a
los niños.
Zuby, que
ordenada, metódica y disciplinada. Me
encantó que colaboraras en mis clases y fueses una ayuda muy valiosa.
Zubi y Eva |
No me queda más
que dedicar las siguientes líneas a Blanquita, nuestra Coordinadora de
Educación Inicial, fui invitada por ella a darles clases a sus niños cuando me
encontraba en la Primaria. Fue un reto muy hermoso el dedicarme a iniciar en la
Fe a estos pequeñitos. Mucho más cuando se me dio la oportunidad de diseñar las
carpetas que trabajaríamos. Gracias por la confianza, gracias por ser ese
hombro en el cual me apoyé cuando las enfermedades y las incertidumbres
rondaron mi vida. Gracias por ese abrazo cuando eran superadas, por el saludo
matutino de “Ave María Purísima” o el “Aleluya”, no lo olvides Blanquita: hacer
presente a Dios en nuestras vidas en todo momento y ver el rostro de Cristo en cada una de las personas que se acercan a ti.
Un personaje más,
Pablo, el profesor de informática, con un hambre de Dios que el Señor Jesús lo
colocó
en mi camino y a quien a pocas semanas de retirarme del colegio le
invité a participar en un Cursillo. Su Fe ha sido alimentada con ese encuentro,
lo dejo todo en manos de Dios.
Me retiro del
colegio, sabiendo que he cumplido lo que se me ha pedido y ahora se me lleva a
otro servicio pero no sin antes meditar mucho las siguientes palabras que
llegaron a mi, cuando redactaba mi carta
de culminación de contrato.
“Cuando Jesús no
es más que un conjunto de noticias, de dogmas o de herejías, alguien del pasado,
una memoria, no una presencia, se queda en un personaje. Es necesario
convencerse de que Él está vivo y presente. es más importante hablar con Él que
hablar de Él”. Fr Rainiero Cantalamessa.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén