Extensión Contemplativa
Internacional
Anuncio a la Comunidad de Practicantes
de la Oración Centrante
Es con
profundo dolor que compartimos la noticia del fallecimiento de nuestro amado
maestro y padre espiritual Thomas Keating. El Padre Thomas ofreció la última
entrega de su cuerpo en la Abadía de San José, en Spencer, Massachusetts el 25
de octubre, 2018, a las 10:07 pm. Fue un modelo para nosotros de la increíble
riqueza y humildad surgidas de una relación divina que, no solamente es
posible, sino que ya es realidad en cada ser humano. Esa fue su enseñanza y ésa
fue su vida. Ahora su luz brilla desde la altura y la profundidad del corazón
de la Trinidad.
La comunidad
monástica del Monasterio de San Benito se unirá a la comunidad de Contemplative
Outreach y Extensión Contemplativa Internacional en una liturgia en su memoria.
El lugar, la fecha y la hora de esta liturgia serán anunciados en breve. El
Centro de Acción y Contemplación la transmitirá en vivo por la web y grabará el
servicio para que todos podamos unirnos por lejos que estemos geográficamente.
También
ofreceremos detalles acerca de una próxima vigilia mundial de 24 horas, así
como sugerencias para conmemorar al Padre Thomas en las comunidades locales.
Les agradecemos no llamar a los monasterios de Snowmass o Spencer.
t
El Padre
Thomas nació en Nueva York en 1923 y recuerda haber sentido una atracción hacia
la vida religiosa desde muy temprano. Inició sus estudios universitarios en la
Universidad de Yale y se graduó, en un programa acelerado, de la Universidad de
Fordham. Cuando asistía a la universidad, el director espiritual de un
campamento de verano donde él trabajaba llevó a los consejeros al monasterio
trapense Nuestra Señora del Valle, en Rhode Island, al que se incorporó el
Padre Thomas en 1944. Fue ordenado como sacerdote en 1949. En 1958 fue enviado
a Snowmass, Colorado, como superior y responsable de la construcción y la
administración del nuevo monasterio de San Benito. en 1961 regresó a la Abadía
de San José, donde sirvió como Abad por veinte años. Durante esa época, fue
invitado a Roma en 1971, tras el Concilio Vaticano II, donde el Papa Pablo VI
le pidió a los sacerdotes, obispos y teólogos que renovaran la tradición
contemplativa cristiana. Como respuesta a ese llamado, el Padre Thomas, junto
con William Meninger y Basil Pennington, se basaron en la antigua práctica de
la Lectio Divina y su movimiento hacia la oración contemplativa, o descanso en
Dios, para desarrollar la práctica de la Oración Centrante. La idea original
era llevar las prácticas contemplativas del monasterio a la comunidad cristiana
más amplia, enseñándolas a sacerdotes y, finalmente, a los laicos. Después de
20 años como Abad, el Padre Thomas renunció y regresó al monasterio de San
Benito, donde se dedicó más plenamente a transmitir la dimensión contemplativa
del evangelio al público en general mediante la fundación de Contemplative
Outreach en 1984.
Otro fruto del
Vaticano II fue que a los católicos se les dio permiso y se les animó a
reconocer la labor del Espíritu en otras religiones. En Dios es Amor: el Corazón de Toda la Creación, el Padre Thomas
afirma: “Ninguna religión es capaz de contener la totalidad de la sabiduría de
Dios, que es infinita.” Uno de los legados más importantes del Padre Thomas es
que, por más de 30 años, convocó a un diálogo interreligioso en San Benito, conocido
luego como las “Conferencias de Snowmass.” Fue un intento de diálogo y
comprensión de las contribuciones de las tradiciones espirituales de todas las
religiones y de concluir con las actitudes culturales que conducen a la
separación y la violencia.
Como muchos de
ustedes saben, el Padre Thomas viajó por todo el mundo, enseñando a los laicos
y a comunidades acerca de la tradición contemplativa cristiana y la experiencia
psicológica de la travesía espiritual. Una vez le dijo a Mary Clare Fischer,
reportera de 5280 Magazine que él
pensaba que lo más difícil de su compromiso con la vida monástica sería su
separación del mundo exterior, puesto que “Yo sentía un gran deseo de compartir
los tesoros que había encontrado en el camino hacia una relación más profunda
con Dios.” Su obra cumbre, las conferencias tituladas La Travesía Espiritual, es una manifestación de ese deseo.
En la última
década de su vida, el Padre Thomas dijo: “Estoy en un punto en el que no deseo
hacer nada, excepto la voluntad de Dios, y ésa puede ser que no haga nada. Pero
no hacer nada es una de las actividades más grandes que hay y ¡toma una
sorprendente cantidad de tiempo! Cualquiera que sea el tiempo que sobre de cada
día, es una oportunidad para que Dios se haga cargo de mi vida más completamente,
a cada nivel y en cada detalle.” (Dios es
Amor: El Corazón de Toda la Creación).
Pat Johnson, su
amiga de muchos años y una de las fundadoras del ministerio de retiros en el
Monasterio de San Benito, tuvo una conversación reciente con el Padre Thomas en
la cual él le expresó agradecimiento por su servicio a Contemplative Outreach durante
muchos años. Pat dice: “Aquí tenemos a este hombre, al final de su vida,
experimentando dolor, y todavía devolviéndolo todo al universo. Si alguna vez
tuve un ejemplo de lo que significa amar incondicionalmente, este momento fue
un enorme ejemplo. La grandeza de su entrega, la grandeza de su humildad, me
dejaron sin ningún sitio al que acudir, sin nada que hacer, y el reconocimiento
de que no hacer nada toma mucho, mucho tiempo…¡Qué modelo tan maravilloso es él
para todos los que tratamos de transitar nuestras vidas con gracia y fuerza!”
El Padre
Thomas nos confía ahora la difusión de su mensaje de amor y transformación, nos
invita a continuar transmitiendo las riquezas de la dimensión contemplativa del
Evangelio y del método de la Oración Centrante a las generaciones futuras.
Justamente antes de que Jesús fuese llevado más allá de sus discípulos, tras su
pasión y resurrección, él les dijo:
—“No les
toca a ustedes conocer la hora ni el momento determinados por la autoridad
misma del Padre ... Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes,
recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y
Samaria, y hasta los confines de la tierra. Habiendo dicho esto, mientras ellos
lo miraban, fue llevado a las alturas hasta que una nube lo ocultó de su
vista”. (Hechos 1: 7-9)
El Padre
Thomas ahora está oculto a nuestra vista.
Abrámonos más que nunca a la presencia de la Trinidad que nos habita,
profundizando nuestra unidad en la oración y el servicio. Continuemos
perseverando en nuestro consentimiento a la presencia y la acción de Dios en
nuestro interior y entre nosotros, y permitamos que la inspiración y el aliento
de Dios nos muevan y guíen cuando buscamos encarnar y entregar los dones que
hemos tenido el privilegio de recibir.
Con profunda
gratitud y corazones abiertos y adoloridos,
Contemplative
Outreach y Extensión Contemplativa Internacional