Así, si puedo leer un libro

Recuerdo un sacerdote que me indicaba que mi formación como católica debía ser constante y podía hacerla  de forma autodidacta.

 Creo que en gran parte así ha sido, pues en ocasiones la búsqueda de la verdad me llevaba de un lugar a otro en la web. En una ocasión tuve un gran regalo, un matrimonio se residenciaba en el exterior y nos invitaban, a mi esposo y a mí a visitarles para hacernos entrega de libros que no podrían llevar consigo. Fue así como llegaron a mis manos un número de publicaciones del Movimiento de cursillos,  así como obras clásicas para todo creyente. Como fue hacia mis inicios en el estudio, muchos títulos no los conocía, pero ahora tengo hasta varios documentos del Vaticano II al alcance de la mano para estudiarlos en este Año de la Fe. Eso lo veremos si Dios Padre me deja organizarme porque me atropella con ideas, que si no las anoto, las olvido.

Ha sido muy significante para mi, el estar por más de un año inscrita en un grupo Yahoo donde realizamos estudios de formación.  Ha sido la forma más pedagógica para mí, de leer un libro y compartir lo leído en un grupo. Antes leía y a los días no me acordaba de nada. Con los años mi capacidad de atención ha disminuido mucho, pero de esta forma me veo en la necesidad de hacer anotaciones al margen y me ha encantado.

 Estamos por terminar otro libro, que me ha revelado muchas cosas, lo que tal vez un director espiritual, del cual carezco, pudo haberme dicho y orientado, lo conseguí muchas veces en el grupo. Por supuesto hay unos moderadores y unas normas. Estoy muy contenta y agradecida. Espero ansiosa el próximo libro a trabajar.

Así que como estamos en el Año de la Fe, esta puede ser una de las actividades que podemos hacer para renovar y profundizar nuestra Fe, anotarnos en un grupo de estudio en la web y compartir la lectura-estudio.

Te invito a realizarlo en la medida de tus posibilidades de tiempo y tus inclinaciones hacia la lectura.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.